A veces la tarea es encontrar la tarea

#Reflexiones #Tareas #Trabajo

Muchas veces me asignan tareas que no están bien definidas. Algo como: “hacer que esto funcione”, “agregar tal feature”, o “esto está lento”. Pero no siempre está claro qué significa eso, o si lo que se pide tiene sentido.

Me pasa seguido que paso más tiempo entendiendo qué se espera, que resolviendo el problema. A veces lo que se pide es imposible, innecesario o directamente no resuelve nada. Y entonces la tarea real es otra: entender el problema, proponer algo mejor, o incluso decidir no hacer nada.

También pasa que me cae una tarea que no me corresponde. No es de mi equipo, o ni siquiera es un problema técnico. En esos casos, mi trabajo es encontrar quién debería hacerse cargo. A veces eso lleva más trabajo que resolver el ticket original.

Todo esto no siempre se ve como parte del trabajo técnico, pero lo es. No se trata sólo de programar. Muchas veces el verdadero valor está en entender bien el problema, redirigir cuando hace falta, o ayudar a que no se pierda tiempo en tareas mal planteadas.

Desarrollar software es más que solo programar. Es pensar, filtrar, decidir y, muchas veces, hacer preguntas antes de escribir una sola línea de código.